En el año 1949 la Villa de Vallecas era un pequeño pueblo separado físicamente de la ciudad de Madrid. Era un pueblo dormitorio para muchos inmigrantes de Extremadura, Andalucía y la así llamada entonces Castilla la Nueva; personas que habían venido en busca de trabajo, participando en la reconstrucción de la ciudad de Madrid devastada a causa de la guerra civil.
Durante la Semana Santa de ese año se celebró en la Parroquia de San Pedro ad Víncula una Misión Cuaresmal dirigida por un famoso predicador jesuita. Allí se detectó la existencia de una urgente necesidad: proporcionar oportunidades educativas a los hijos de aquellos inmigrantes, que no tenían nada en qué emplear su tiempo.
Los ingenieros del ICAI (Instituto Católico de Artes e Industrias), agrupados en la «Congregación Mariana de La Asunción y San Fructuoso», que ya realizaban actividades sociales en la parroquia de La Ventilla de Madrid, decidieron trasladarlas a la Villa de Vallecas, creando la «Asociación Padre Pulgar», asociación sin ánimo de lucro y titular actual del centro.
El día 2 de noviembre de 1949 se abre la matricula en la Escuela de Formación Profesional recién creada; el día 4, «Primer Viernes» de mes, se inaugura el curso en unas aulas cedidas por el Ayuntamiento; y el 7 comienzan las clases. En cinco días se habían inscrito unos doscientos chavales, lo que da idea de la necesidad existente.
Desde entonces, es decir, desde hace sesenta y siete años, la Asociación Padre Pulgar (jesuita fundador del ICAI) ha venido sirviendo a la Villa de Vallecas a través de la educación de su juventud.
Comenzamos con clases de carpintería, mecanizado, ajuste, etc. Unos años más tarde, conocedores ya con más profundidad de las necesidades del pueblo, se abrió un dispensario que ¡hasta tenía rayos X!, siendo el único existente en cuatro kilómetros a la redonda y cerrado al mejorar la asistencia sanitaria en nuestro país. Poco después se abrió el primer curso de Educación Primaria.
Desde entonces, a través de múltiples avatares, hemos conseguido mantener nuestra actividad, pese a las dificultades económicas y de todo tipo, para llegar a lo que somos hoy.
Un colegio concertado de una línea con 335 alumnos, en el que se imparte enseñanza a alumnos de 2° Ciclo de Educación Infantil, Educación Primaria y Educación Secundaria Obligatoria.
Una escuela de Formación Profesional de Grado Medio y Formación Profesional Básica, con un total de 200 alumnos en las especialidades de: Mecánica y Electricidad del Automóvil, (1° y 2° GM, y 1° y 2° de FPB), Informática, (1° y 2° de GM, y 1° y 2° de FPB), y Auxiliares de Clínica.
La formación intelectual y la capacitación profesional no son nuestro único objetivo; nuestra razón de ser está justificada por la educación en virtudes, es decir: que nuestros alumnos vivan los valores cristianos que tratamos de transmitirles. Por eso, nuestro lema educativo es «En Vallecas con Excelencia», el cual va acompañado de nuestro lema formativo: «Generosidad», contemplada este año desde el aspecto de la «Misericordia».
Todos aquellos que están involucrados en tareas educativas o tiene hijos en edad escolar conocen las dificultades que hoy lleva consigo la transmisión de estos valores, tanto por las presiones del entorno social en que viven los chicos, como por la degradación que ha sufrido en las última décadas el entorno familiar y escolar. Nosotros cuando miramos a nuestra historia, y a nuestra realidad, estamos convencidos de que el que nos ha mantenido en la brecha es el Sagrado Corazón de Jesús.
No tenemos las mejores instalaciones, porque nuestros edificios fueron construidos en los años 50, pero somos un colegio abierto, en el que las familias tienen un acceso fácil a todos los estamentos del centro. Nos consideramos como una familia, con las ventajas del trato cercano, a pesar de los inconvenientes que esto puede ocasionar a la gestión; preferimos la apertura a los padres a la cerrazón de un modelo rígido de gestión.
Estamos igualmente abiertos a todos aquellos centros educativos a los que nuestra modesta experiencia pueda ser de utilidad.
¡Quiera el Sagrado Corazón de Jesús y Nuestra Señora seguir bendiciéndonos para poder servir con todas nuestras fuerzas a la Villa de Vallecas!