Colegio Sagrado Corazón

Sagrado Corazón

COLEGIO Y CENTRO DE FORMACIÓN PROFESIONAL

CATÓLICO Y PRIVADO-CONCERTADO

"Con el corazón mirando al futuro"

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Este año… ¡hemos vuelto a armar el Belén!

Tras años de divertidísima experimentación, en los que la creatividad y la imaginación nos llevaron a instalar el Nacimiento en la Nao de Juan Sebastián El Cano, lo que nos dio el primer premio en el concurso de belenes de Vallecas. O a situar al Niño Jesús en el interior de una virtuosa representación a escala de nuestro cole, o en una Acrópolis del siglo XXII hecha de piezas mecánicas…. Este año, en el que vuelven todas las tradiciones, en el que la vida recupera ya su ritmo normal tras el parón pandémico, recuperamos nosotros también nuestro tradicional Portal de Belén.

Volvemos al Nacimiento de toda la vida. Con sus tres Reyes Magos siguiendo la Estrella que los había de guiar hasta el hijo de Dios. Con su ángel de Anunciación, sus pastores, sus recolectores, sus hilanderas, sus animales, sus huertos, su musgo, su serrín y sus montañas hechas de corcho de alcornoque.

Lo montamos el fin de semana pasado… ¡Y cómo disfrutamos! Vinieron refuerzos a ayudarnos con la creatividad. Sobre todo José Ferrer, veterano en estas lides, marido de nuestra querida directora honorífica, Lola Bogas, quien también estuvo ahí aportando su energía y su aliento.

Estuvieron las directoras, el jefe de estudios y un buen puñado de voluntarios, junto a varios ex alumnos que aprovecharon la ocasión para, disfrutando del tono desenfadado del momento, acercarse a saludar, asombrarse con el cambio que ha dado el colegio merced a las obras de los últimos años, y, de paso, echar una mano, que siempre se agradece.

Desempolvamos las figuras de filigrana que componen nuestro Belén tradicional, algunas de ellas valoradas en cientos de euros, si hablamos de lo material, o miles de ellos, si las juzgamos desde lo emocional. Planificamos, ejecutamos, trajimos esto, llevamos lo otro, buscamos tierra, descartamos adornos innecesarios… Y, entre paseos y figuras, la mañana fue dando paso al escenario de la noche más importante para la historia del Cristianismo, aquella en la que un Niño nació para traerle esperanza al mundo.

Y aún tuvimos tiempo de parar a tomar un piscolabis,  de arrancarnos con unos villancicos y de hacer unas cuantas fotos que con alegría compartimos con vosotros.

Estos días, queridas familias, abriremos las puertas  del aula en la que se encuentra el Belén para que podáis disfrutarlo. Primero serán los niños los que lo vean. Luego os tocará a quien quiera de vosotros en la jornada festiva del 20 de diciembre. ¡Ya estamos disfrutando solo de pensarlo!

¡Nos vemos pronto!

     

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